Imitar a Papá


Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados.(Efesios 5:1)

Imitar a Dios sería una tarea imposible sin Jesús, porque él es la revelación de Dios, que se manifestó en forma humana, para que veamos a Dios semejante a nosotros. Jesús es nuestro modelo a seguir, el maestro de quien debemos aprender a vivir, es el Señor a quien debemos obedecer en todas sus demandas, es el amigo entrañable con el que siempre podemos contar, es nuestro buen pastor, nuestro hermano mayor. Imitemos a Jesús en su obediencia al Padre, en su amor por Dios y por nosotros, Jesús dijo: aprended de mí que soy manso y humilde de corazón y hallaréis descanso para vuestras almas (Mateo 11:29 b)
Somos hijos de Dios, así que tenemos que ser semejantes a nuestro Padre, como dijo Jesús: Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.(Mateo 5:48)
Imitar a Dios como hijos, es una elección, es la intención interior de ser como nuestro papá celestial, que privilegio ser hijos e hijas de Dios!

Iglesia en Antioquia

Hechos 11:22-23
 22 Llegó la noticia de estas cosas a oídos de la iglesia que estaba en Jerusalén; y enviaron a Bernabé que fuese hasta Antioquía.
 23 Este, cuando llegó, y vio la gracia de Dios, se regocijó, y exhortó a todos a que con propósito de corazón permaneciesen fieles al Señor.

Algo estaba pasando en Antioquia, una iglesia nacía en la ciudad, y el Espíritu Santo estaba manifestándose, respaldando a los predicadores, y abriendo el corazón de la gente para que crea en el mensaje del evangelio. Esto es lo que se llama un avivamiento. Cuando llegó el Apóstol Bernabé, estableció la iglesia y dejó un mensaje clave para los nuevos creyentes: que con propósito de corazón permanecieran fieles al Señor. 
El propósito está relacionado con la intencionalidad, es la motivación que mueve a una persona a determinar una actitud que pone en acción. Propósito, intención y acción nacen en el corazón, de los que son tocados por Dios para ser parte de la iglesia.
¿Qué significa? Que para buscar a Dios debe haber una intencionalidad, si vamos a orar no lo hacemos como autómatas sino con ganas con intención de buscar a Dios para que ocurra un milagro. 
La intención marca el propósito de llegar a un resultado. El consejo de la palabra de Dios dice que se debe buscar a Dios con intención, tiene que nacer en nosotros una motivación por buscar a Dios y caminar en su propósito, y el primer paso que debemos dar en esa dirección es: buscar mantener la fidelidad al Señor. 
Conclusión: activa tu intención de buscar a Dios ejercitando la fidelidad al Señor.

( Cuatro palabras claves para fidelidad: Biblia, Oración, Congregación, Predicación)