El Salmo 23 es uno de los textos bíblicos más conocidos, y más hermosos de la palabra de Dios. Su autor, el rey David, era un líder, un hombre de guerra, tenía el carácter de un Rey, pero también era humilde y conocía sus debilidades humanas. David tenía una profunda relación con Dios, y en cada crisis de su vida su refugio, su ayuda, fue su Dios. Él sabía que delante del Señor era como una débil, e indefensa oveja, que solo podía esperar en la ayuda y protección de su Pastor.
La Biblia presenta a Dios de diferentes formas, cada una resalta una característica especial de Dios, pero la imagen que nos presenta el Salmo veintitrés de Dios como pastor de su pueblo, de aquellos que confían en él, es la más dulce y acertada de todas. Jesus hizo referencia a esta imagen, en la parábola del buen pastor, hablando de sí mismo, declaró: "el buen pastor da su vida por sus ovejas".
Los que creemos en Jesús somos parte de su rebaño, somos sus ovejas, indefensos y débiles necesitamos de nuestro Pastor, Jesús. El nos guía por praderas verdes, llenas de pastos, por lugares deleitosos, y ríos limpios con aguas de reposo, nos da protección, y nos libra de los peligros, en Jesus tenemos todo lo que necesitamos.
Si hoy te sientes como una ovejita perdida, recuerda que tú buen pastor el que da su vida por vos, va hacia tí, para recatarte, nunca te dejará , no te abandonará jamás, él es Jesús.
P. Aldo
La Biblia presenta a Dios de diferentes formas, cada una resalta una característica especial de Dios, pero la imagen que nos presenta el Salmo veintitrés de Dios como pastor de su pueblo, de aquellos que confían en él, es la más dulce y acertada de todas. Jesus hizo referencia a esta imagen, en la parábola del buen pastor, hablando de sí mismo, declaró: "el buen pastor da su vida por sus ovejas".
Los que creemos en Jesús somos parte de su rebaño, somos sus ovejas, indefensos y débiles necesitamos de nuestro Pastor, Jesús. El nos guía por praderas verdes, llenas de pastos, por lugares deleitosos, y ríos limpios con aguas de reposo, nos da protección, y nos libra de los peligros, en Jesus tenemos todo lo que necesitamos.
Si hoy te sientes como una ovejita perdida, recuerda que tú buen pastor el que da su vida por vos, va hacia tí, para recatarte, nunca te dejará , no te abandonará jamás, él es Jesús.
P. Aldo