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Ofrenda y Sacrificio

Y ninguno se presentará delante de Jehová con las manos vacías; (Deuteronomio 16:16b)

Dios mandó a su pueblo que no debía presentarse delante de él con las manos vacías, la verdadera adoración incluye el sacrificio, en el tiempo de la ley de Moisés el sistema de sacrificios era muy ordenado, y no se podía ministrar a Dios sin un sacrificio. Hoy la adoración también incluye el sacrificio, Jesús es el cordero de Dios que quitó el pecado, y es la ofrenda perfecta (Hebreos 10:12) el Apóstol Pablo dice que debemos presentar nuestro cuerpo en sacrificio vivo a Dios (Romanos 12:1) y también cuando adoramos a Dios con nuestra boca estamos ofreciendo una ofrenda de sacrificio al Señor.(Hebreos 13:15)
La iglesia sacrifica alabanza y adoración como una ofrenda a Dios en cada reunión, la vida del creyente tiene que ser de adoración constante, llevar una vida de buen testimonio, poniendo por obra la palabra de Dios, negarse a vivir en pecado, para vivir en santidad, es una ofrenda para Dios. Todo lo que hacemos y tenemos en esta vida debe ser una ofrenda para Dios, presentarse con las manos vacías significa llevar una falsa vida cristiana, es adorar a Dios con la boca, pero no con el corazón, es negarle a Dios lo que le pertenece, es no dar fruto para Dios.
Todo es de Dios, y nosotros mismos fuimos comprados por precio ( 1 Corintios 6:20) y esto incluye también nuestras finanzas, el dinero que percibimos por nuestros negocios o profesiones también pertenece a Dios. En el antiguo pacto el mandato de Dios era entregar los diezmos de todo, ahora no deben ser entregados los diezmos, más bien el cien por ciento de todo lo que tenemos debe ser entregado a Dios. 
En el presente no damos a la iglesia ofrenda de animales o vegetales, como en la antigüedad, nuestras ofrendas y diezmos son entregados en la iglesia para Dios, y con esa provisión se debe financiar la extensión del reino de Dios, esto incluye los gastos de la iglesia, la ayuda a los necesitados, el pago de impuestos, y todo lo que tiene que ver con el mantenimiento del edificio de la iglesia, el sonido, la climatización, etc .
Todo hay que pagarlo, hasta las biblias que tenemos en las manos fueron pagadas, la conexión de nuestros celulares para ver las aplicaciones cristianas se paga.
Y cuando damos para Dios estamos sembrando en su obra, estamos ayudando a los ministros que sirven las 24hs, si hacemos esto con la motivación correcta, Dios añada bendición a nuestras finanzas, el es fiel. 
No te presentes delante de Dios con las manos vacías, él abre su mano cada día para colmar de bendiciones nuestra vida, así que es imposible, si somos personas de fe, que no tengamos nada para ofrendar a Dios. La ofrenda o el diezmo es un principio Bíblico, que debemos practicar, no debemos dar lo que nos sobra, si sembramos escasamente cosecharemos escasez, si le damos al hombre en vez de a Dios, recibiremos maldición, aprende y práctica este principio de la palabra de Dios, y disfrutarás de todas las promesas de provisión escritas en la palabra de Dios. David dijo: "no daré al Señor ofrenda que no me haya costado nada" (1 Crónicas 21:24)


ADMonegal

Semillas de Bendición

Siembra tu semilla por la mañana, y por la tarde, no dejes de trabajar porque no sabes si la ganancia vendrá de una actividad o de la otra, o quizás de ambas.

Eclesiastés 11:6

Para cosechar hay que sembrar primero, en una lógica del trabajo de la agricultura. Cuando salimos de viaje fuera de la ciudad, y comenzamos a alejarnos hacia zonas descampadas, podemos ver a los costados del camino, hectáreas de campos, algunos con hermosos girasoles, y otros con trigo o soja, listos para cosechar, se ven como un gran alfombra sobre la tierra. Detrás de este hermoso resultado, hay un arduo trabajo, de preparación del terreno, abono, arado y siembra. Está lógica de la agricultura es utilizada muchas veces en la palabra de Dios, para explicar leyes y realidades celestiales, Jesús enseñó una parábola sobre el sembrador, Lucas 8:5-15, los Apóstoles también ilustraron sus enseñanzas con la misma figura por ejemplo:El labrador, para participar de los frutos, debe trabajar primero, 2 Timoteo 2:6.
Cuando venimos al Señor llegamos que falta de todo, algunos llegaron enfermos, falta de salud, otros sin trabajo, otros si paz en su corazón, y Dios cambia esa condición, renueva la vida de aquellos que acuden a Él. Y nos hace jornaleros en su campo, ahora somos servidores de aquel que nos rescató, de la esclavitud para vivir en la libertad de su viña, nos dió un propósito, un sentido en la vida, trabajando para el Rey. Nos dió semillas para sembrar, todo lo que hacemos para el Señor sin esperar recibir nada a cambio, es semilla que al tiempo señalado nos dará fruto, por eso es importante sembrar, primero porque si no siembras tu semilla se pierde, y a futuro no podrás cosechar nada, y segundo porque si no siembras no recibirás más semilla: Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia; 2 Corintios 9:10. Puedes sembrar para la carne o para el espíritu pero según lo que siembres eso cosecharás: Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna. Gálatas 6:8 
Recuerda que Dios nos da semilla, siembra el amor de Dios y cosecharás sus bendiciones, Siembra de la semilla de tu bendición, y Dios multiplicará todo lo que tienes, tu abundancia o escasez depende de lo que tú siembres en Dios, y su campo, siembra en buena tierra. Hay mucha enseñanza que tiene que ver con la siembra, la semilla, el campo, la cosecha y todas esas figuras, pero la palabra de Dios hoy nos dice: por la mañana siembra tu semilla, y por la tarde no dejes reposar tu mano; tu tienes semilla para sembrar, comienza hoy y Dios dará más semilla y abundante cosecha, en todas la áreas para vos y tu familia, siembra en abundancia y cosecharás abundancia de para del Padre Celestial. 


P. Aldo