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Antes de la dádiva es la demanda

¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo? Lucas 6:46

Jesús es Señor y Rey, se le escucha y se le obedece, muchos confunden el amor de Cristo, y piensan que El necesita algo de nosotros, dejan de respetar y reverenciar su señorío como Él se merece. Tienen la imagen de un Jesús pobre y desvalido, piensan que Jesús es como esos ídolos que estaban acostumbrados a servir.
Por eso Jesús dice: me llaman Señor pero no me obedecen.
El servir a Jesús no es un asunto de conveniencia, debemos entender que El es Rey, nosotros somos sus siervos. Un siervo no tiene derecho a elegir en qué momento va a cumplir con su servicio, tampoco tiene derecho a elegir las condiciones de servicio, ni el lugar, ni el clima. Un siervo es un esclavo, pero por naturaleza el hombre la mujer es rebelde a la autoridad, nadie quiere someterse a nada, y en estos tiempos que vivimos mucho menos.
Dios no es un tirano que somete por la fuerza a sus hijos, no es lo mismo el sometimiento forzado por una autoridad que por la fuerza impone dominio, que la sumisión voluntaria a una autoridad que nos ama, más allá de lo que podemos entender. La regla básica que la Biblia nos enseña es recibir la palabra de Dios en nuestro corazón y luego obedecerla, solo así podemos disfrutar de los beneficios de nuestro Señor. "Antes de la dádiva es la demanda" la demanda de Dios es creer y obedecer al Señor Jesucristo, y la dádiva es vida eterna en Él. Es una ley espiritual antes de la dádiva es la demanda, hay demandas de Dios que debemos cumplir antes de recibir sus preciosas dádivas.
El desafío de hoy es ponernos a cuenta con las demandas del Señor, hacer lo que Él nos pide, para poder disfrutar de sus bendiciones.

Ptr. Aldo

La demanda de Dios

Que el SEÑOR responda a tu clamor en tiempos de dificultad; que el nombre del Dios de Jacob te proteja de todo mal.
Que te envíe ayuda desde su santuario y te fortalezca desde Jerusalén.
Que se acuerde de todas tus dádivas y mire con agrado tus ofrendas quemadas. Interludio
Que él conceda los deseos de tu corazón y haga que todos tus planes tengan éxito.
Salmo 20:1-4 (NTV)

Por más grande que sea tu dificultad si clamas a DIOS él te oirá desde los cielos y te rescatará!
Te fortalecerá, y si eres obediente y dadivoso, tu Alabanza será grata, y todo lo que emprendas te saldrá bien, porque el favor de Dios te rodea.
Todas esa bendiciones están disponibles para los creyentes, todos los días Dios escucha, protege, concede, y hace que tengas éxito en todas la áreas de tu vida.
La única demanda de Dios es la obediencia, ese compromiso con el Señor que genera cambios en nosotros y alinea nuestra vida con la voluntad de Dios, la demanda de Dios es que lo amemos como él nos ama, que guardemos su Palabra y El sea nuestra forma de vida.
Hay un orden Espiritual primero la demanda después la dádiva, si somos obedientes la bendición vendrá.
Este salmo de David expresa el deseo de Dios para nosotros, y el Espíritu Santo mismo nos habla por medio de él.
Que en este día esta palabra de Dios se cumpla en tu vida.

Que tengas un día Celestial.

A.D.Monegal