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Nuestra Refugio

Salmo 9:9-10
9 Jehová será refugio del pobre, Refugio para el tiempo de angustia.
10 En ti confiarán los que conocen tu nombre, Por cuanto tú, oh Jehová, no desamparaste a los que te buscaron.

Confiar en Dios es un tesoro que tiene la gente de fe, son personas que conocen sus límites, y saben que Dios puede llevarlos más allá. Los que entienden que sin Dios, todo es en vano, la Biblia los llama justos, por qué no solamente confían en Dios para que los levanté cuando están caídos, sino que se esfuerzan por vivir agradando al Señor con sus hechos.
Dios es refugio para los pobres, dice está palabra, pero no debemos pensar en la pobreza material solamente, la palabra se refiere a los pobres en espíritu, Jesús habló de ellos, en las bienaventuranzas, "Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos." Mateo 5:3
Los pobres en espíritu son los que dependen plenamente de Dios, saben que sin Jesús, nada pueden hacer, viven buscando su presencia, para ellos Dios es un refugio en el tiempo de la angustia.
Conocer el nombre de Dios es conocer a Dios, ¿cómo podemos confiar en un Dios que no conocemos? Por eso el texto dice:"En ti confiarán los que conocen tu nombre," Jesús vino para revelarnos al Padre, es necesario buscar al Señor para conocerlo, y así poder depositar nuestra confianza en Él. Dos bendiciones hay para nosotros en estos versículos, refugio y protección. En estos versículos encontramos tres acciones que debemos aplicar, ser pobres en espíritu, conocer a Dios, y buscarlo todo tiempo.


P. Aldo Daniel Monegal

Bienaventurados

Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios.
Lucas 6:20

Jesús miro fijamente a sus discípulos, cuando les declaró esta palabra, notemos que dos clases de personas estaban en ese momento con el Señor, la muchedumbre que buscaba un milagro y sus discípulos. En la actualidad también hay una diferencia entre los que se identifican como creyentes y los que son discípulos, los creyentes son las personas que se relacionan con Dios solo los días que van a la iglesia, no están dispuestos a entregar sus vidas al Señor son simpatizantes de Dios, ellos siguen siendo "dueños" de sus vidas y Dios no entra en sus planes y proyectos, le ponen límites a Dios. Los discípulos son los que entregaron todo a Jesús, van a la iglesia pero saben que servir al Señor es una tarea de veinticuatro horas al día, entienden que nada les pertenece todo es de su Señor, y que sin Jesús no son nada los discípulos de Jesús tienen una sola meta servir a su Señor y parecerse cada día más a su maestro.
Jesús los llamo "bienaventurados vosotros los pobres" y no estaba hablando de la pobreza económica de la miseria y la escasez, el hablaba de depender enteramente del Padre celestial, un pobre nada tiene, no puede aferrarse a nada solo le queda confiar en Dios. Los discípulos de Jesús saben que Dios es el que suple todas sus necesidades, son pobres porque en espíritu porque su dependencia y provisión viene del Dios.
La Biblia dice que Jesús se hizo pobre para que nosotros fuésemos enriquecidos,  
Seamos discípulos, seamos pobres en espíritu, y la abundancia del cielo lloverá sobre nosotros, la promesa es que el Reino de los Cielos nos pertenece, somos ciudadanos de cielo, no nos conformemos con ser simples creyentes buscando un milagro personal, seamos discípulos de Jesús con un propósito, con un destino profético las promesas son de los discípulos y la herencia del Padre es para los hijos, "bendiciendo te bendeciré y serás de bendición."

Aldo Daniel Monegal