Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo. Salmo 55:22
Esta promesa de Dios se repite en toda la Biblia, Jesús dijo vengan a mí los que están trabajados y cansados y yo los haré descansar. Dios sabe que a veces llevamos cargas que no nos pertenecen, también sabe que las cargas de esta vida, nos generan peso y cansancio, espiritual, físico y emocional, como Padre Dios quiere darnos descanso, y en realidad solamente Dios puede quitar las cargas, y dar el descanso que necesita toda la humanidad.
Jesús lo declaró a sus discípulos, y a las multitudes que le seguían, porque sabía que eso era lo que necesitaban, y eso es lo que hoy necesitamos nosotros. Este versículo es la prueba de que Dios no cambia, el mismo Dios del Antiguo Testamento, y el Señor Jesús es el mismo, él quiere bendecirnos.
Tenemos que tomar la decisión de entregar nuestras cargas a Dios, tenemos que rendirnos, reconocer que no podemos más, que somos limitados, y acudir a Dios la fuente de toda fortaleza, que está disponible para nosotros siempre. Dios es fiel, está esperando que vengas a Él, para levantarte y ayudarte a seguir adelante con su ayuda, llegaremos a la meta, alcanzaremos la felicidad y la vida, no esperes más entrega tus cargas al Señor hoy.
Ptr. Aldo Daniel Monegal
Esta promesa de Dios se repite en toda la Biblia, Jesús dijo vengan a mí los que están trabajados y cansados y yo los haré descansar. Dios sabe que a veces llevamos cargas que no nos pertenecen, también sabe que las cargas de esta vida, nos generan peso y cansancio, espiritual, físico y emocional, como Padre Dios quiere darnos descanso, y en realidad solamente Dios puede quitar las cargas, y dar el descanso que necesita toda la humanidad.
Jesús lo declaró a sus discípulos, y a las multitudes que le seguían, porque sabía que eso era lo que necesitaban, y eso es lo que hoy necesitamos nosotros. Este versículo es la prueba de que Dios no cambia, el mismo Dios del Antiguo Testamento, y el Señor Jesús es el mismo, él quiere bendecirnos.
Tenemos que tomar la decisión de entregar nuestras cargas a Dios, tenemos que rendirnos, reconocer que no podemos más, que somos limitados, y acudir a Dios la fuente de toda fortaleza, que está disponible para nosotros siempre. Dios es fiel, está esperando que vengas a Él, para levantarte y ayudarte a seguir adelante con su ayuda, llegaremos a la meta, alcanzaremos la felicidad y la vida, no esperes más entrega tus cargas al Señor hoy.
Ptr. Aldo Daniel Monegal