El verdadero descanso

Mateo 11:28-30
 28  Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.
 29  Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas
 30  porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

Este es uno de los textos más conocidos del evangelio, Jesús ofrece descanso a todo aquél que se está cansado. Todos buscan descanso, en estos tiempos donde hay tanta actividad, se suma el estrés, la ansiedad, la angustia de no poder lograr los objetivos, se trabaja demasiado sin llegar a satisfacer las necesidades personales. El cansancio no es solamente físico, es emocional y espiritual. 
Jesús nos enseña una gran verdad, el que descansa en Él llega a librarse de la carga y la fatiga de la vida, si descansamos en el espíritu, también nuestra mente y cuerpo disfrutarán descanso. Para Dios es muy importante el descanso, en el libro de Génesis, dice que después de crear todas las cosas, en seis días el séptimo día descansó. Cuando descansamos nuestra mente se despeja, y nos permite contemplar la maravilla de la vida, disfrutar de lo que Dios nos dió, alegrarnos con nuestra familia, qué saludable es descansar, tan importante es para Dios que lo estableció como una ley, para su pueblo Israel, que perdura hasta nuestros días, el sabat.
Jesús pone el énfasis en tres pasos que debemos dar para alcanzar el descanso que nos ofrece, primero debemos ir a Jesús, segundo tomar su yugo, y tercer aprender de él a ser manso y humilde de corazón.
Cada punto es un paso hacia el descanso, es esencial acudir a Jesús, esto significa buscar al Señor hasta encontrarlo, después aceptar su yugo, esto es aceptar las cosas que él nos manda hacer, son sus demandas, porque no son difíciles ni son imposibles de realizar. Y por último dejar que él nos enseñe, imitar al maestro es la tarea del discípulo, ser mansos y humildes de corazón, es la receta para vivir en paz y descansar en el Señor todo el tiempo. Repasemos: 1- búsqueda del Señor; 2- Aceptar sus demandas, tomar el yugo fácil que nos ofrece Cristo; 3- Aprender de Jesús, anhelar ser como nuestro Maestro.
Si aplicamos está enseñanza a nuestra vida Jesús afirma que: hallaréis descanso para vuestras almas.


Bendiciones.

P. Aldo Daniel Monegal. 

Popular en el cielo

Mateo 10:32-33
32 A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos.
33 Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.

Así funciona la gracia de Dios, es un regalo para aquel que lo quiere recibir, y entiende cual es el valor de ese regalo de Dios. Jesús dio su vida por nosotros, nosotros debemos dar nuestra vida por él, Jesús dejo todo por nosotros, también nosotros debemos dejarlo todo por él. Jesús no se avergonzó de nosotros, nos llamos amigos, nos llamó hermanos, dijo que nosotros somos su verdadera familia, fue a la cruz por nosotros, y resucitó por nosotros, ascendió a Cielo para hablarle al Padre de nosotros, cuanto más debemos hablarle a la gente de los que Jesús es, y de los que hizo por la humanidad.
Negar a Jesús delante de los hombres, no es simplemente callar y pasar desapercibido, negar a Jesús es hacer lo que hizo Pedro cuando le dijeron: tú eres uno de sus discípulos! Y él dijo no es cierto, yo no lo conozco.
Aveces nuestros hechos niegan a Jesús, cuando queremos congraciarnos con el mundo, o con un grupo de amigos, somos capaces de negar a Jesús por ser populares.
Recuerda, que negar a Cristo es volver atrás, es perder la gran oportunidad de ser conocido en el cielo, que es mucho mejor que ser popular en la tierra.

Bendiciones !

La oveja perdida

Lucas 15:4-7

4  ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?
 5  Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso;
 6  y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido. 
 7  Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento.

Esta parábola de Jesús nos enseña sobre el amor de Dios, Jesús mismo es ese hombre que salió a buscar la oveja perdida, fue tras ella hasta encontrarla, y cuando la halló la cargó sobre sus hombros y la llevo a casa, todos nosotros fuimos ovejas perdidas, "Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros" (Isaías 53:6). Jesús nos encontró y nos cargó sobre sus hombros, ¡Qué grande es el amor del Señor!
Nótese que el pecado es estar perdido, la oveja se perdió, abandonó el rebaño fue tras su propio camino, ignoró el cuidado del pastor, se descuidó y se perdió. Jesús usa esta historia para enseñar sobre el pecado, toda la humanidad está bajo pecado, "Como está escrito: No hay justo, ni aun uno;"(Romanos 3:10) todos necesitamos el perdón de Dios, y Jesús es la puerta, el buen pastor que dio su vida por las ovejas, y vino para buscar lo que se había perdido (Mateo 18:11).
Pero esta parábola también enseña sobre aquellos que se vuelven soberbios y religiosos, y creen que son tan autosuperados que no necesitan de Jesús. El que es humilde sabe que cada día necesita de Dios, como una oveja depende del cuidado del pastor para vivir, así nosotros necesitamos a Jesús. El cielo se alegra cada vez que un pecador se arrepiente y alcanza el perdón del Señor.
Pero hay otro punto de vista en esta historia, la de aquellos que deben imitar a Jesús, y hacer el trabajo de apacentar el rebaño de Cristo, puede ser un líder un pastor, pero todos cumplimos de alguna forma una tarea de cuidar a otro como si fuese una oveja. Los padres cuidan a sus hijos, como pastores, los esposos a sus esposas, las madres también cuidan a sus hijos, y a su esposo, los hermanos mayores a sus hermanos menores, los jefes deben cuidar a sus empleados, y así en cada escalón social, todos debemos imitar al buen pastor, que va por lo que se perdió para recuperarlo, sin descuidar lo que está así cuidado

Lo que debemos saber

1  Por lo tanto, ya que Cristo sufrió dolor en su cuerpo, ustedes prepárense, adoptando la misma actitud que tuvo él y estén listos para sufrir también. Pues, si han sufrido físicamente por Cristo, han terminado con el pecado.
 2  No pasarán el resto de la vida siguiendo sus propios deseos, sino que estarán ansiosos de hacer la voluntad de Dios.
 3  En el pasado, han tenido más que suficiente de las cosas perversas que les gusta hacer a los que no tienen a Dios: inmoralidad y pasiones sexuales, parrandas, borracheras, fiestas desenfrenadas y abominable adoración a ídolos. 
 4  No es de extrañarse que sus amigos de la vieja vida se sorprendan de que ustedes ya no participan en las cosas destructivas y descontroladas que ellos hacen. Por eso los calumnian.
 5  Pero recuerden que ellos tendrán que enfrentarse con Dios, quien juzgará a todos, tanto a vivos como a muertos.

1 Pedro 4:1-5 (NTV)

Una de las dificultades a las que se enfrentan los creyentes es al rechazo de sus antiguas relaciones, incluso familiares y amigos, pueden llegar a criticar y calumniar a los cristianos que se comprometen con Jesús, y cambian radicalmente su vida. Generalmente los amigos y familiares, que no creen en Dios, comparten cosas que van contra la voluntad de Dios, entre si, y son cosas que tiene en común con sus círculo de amigos y familia, cosas que los creyentes ya no pueden compartir, y ese círculo se rompe, generando críticas y calumnias.
Es parte del costó que deben pagar aquellos que deciden tomar el compromiso de seguir a Jesús, estar dispuesto a resistir el desprecio, el maltrato, y hasta los insultos de aquellos que eran amigos, antes de ser creyentes. Pero también es parte del discipulado, padecer lo que Jesús padeció, todos quieren lo extraordinario de la vida de Cristo, pero nadie quiere lo difícil, el dolor que Jesús enfrentó también es parte de sus enseñanzas, como en éstos versículos escribió Pedro:"Por lo tanto, ya que Cristo sufrió dolor en su cuerpo, ustedes prepárense, adoptando la misma actitud que tuvo él y estén listos para sufrir también."
Si sabemos de antemano que pasaremos, momentos de dolor, y que enfrentaremos rechazo de parte de la gente, como Jesús, entonces estaremos preparados, y en vez de amargarnos cuando esto pase, nos vamos a alegrar porque estamos, padeciendo como Jesús, estamos siguiendo sus pisadas.
Los creyentes no debemos alejarnos, o separarnos de la gente, al contrario debemos acercarnos tratar de bendecirlos, orar para que Dios les dé una oportunidad de abrir sus corazones a Jesús, la santidad no tiene que ver con aislarse, y convertirse en un ermitaño, o vivir en un monasterio apartados del mundo, todo lo contrario Jesús dijo: ustedes son la luz del mundo. No somos nosotros los que nos apartamos de la gente, si seguimos a Jesús y somos sus discípulos, la gente se apartará de nosotros, nos rechazará por ser cristianos, pero nuestra convicción y determinación nos llevará a vivir cada vez más comprometidos con Cristo, y veremos la diferencia en nuestra vida y en la vida de aquellos que rechazan al Señor, el fruto de aquellos que viven sin Dios, como antes vivíamos nosotros, y el resultado de seguir a Cristo, y daremos gracias al Señor por habernos llamado. Jesús dijo:  
 18  »Si el mundo los odia, recuerden que a mí me odió primero.
 19  Si pertenecieran al mundo, el mundo los amaría como a uno de los suyos, pero ustedes ya no forman parte del mundo. Yo los elegí para que salieran del mundo, por eso el mundo los odia. 
 20  ¿Recuerdan lo que les dije? “El esclavo no es superior a su amo”. Ya que me persiguieron a mí, también a ustedes los perseguirán. Y, si me hubieran escuchado a mí, también los escucharían a ustedes. 

Juan 15:18-20 (NTV)



Pastor. Aldo D Monegal

Lugares celestiales

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo (Efesios 1:3)

Este versículo tiene una riqueza y significado espiritual incalculable, y es para nosotros. Habla  sobre la nueva posición en la que se encuentran los que son de Cristo, los renacidos en él, disfrutamos de bendiciones espirituales en lugares celestiales. Nuestra unión con Jesús, hace que el poder del cielo habite dentro de nosotros, y nos da acceso a lugares celestiales donde habita Cristo, esto es en el espíritu.
Antes éramos terrenales, sin vida espiritual, muertos en pecado, pero gracias a la misericordia de Dios que nos adoptó, aceptándonos en Cristo, ahora somos espirituales y tenemos acceso a la dimensión celestial, con todas las bendiciones que eso conlleva.
Pablo nos enseña en todas sus cartas, inspirado por Dios, que nos enfoquemos en las cosas de arriba, y nos despojemos de las cosas terrenales. Pero hay algo más, todo lo que nos rodea tiene una raíz espiritual, el origen de lo material es espiritual, si somos Bendecidos en las esferas espirituales, esas Bendiciones se manifestarán en nuestro entorno natural. Esto quiere decir que si tenemos paz en el espíritu, esa paz se manifestará en nuestro entorno, y seremos portadores de la paz de Jesús, si disfrutamos de la provisión de Dios en los lugares celestiales, donde nada falta, y todo es abundancia, esa bendición se va a manifestar en nuestra vida natural. Nótese que el Apóstol Pablo dice: "con toda, bendición espiritual, en los lugares celestiales" algunos dirán lo espiritual no me da de comer, no veo la solución para mí dificultad inmediata, pero recuerda el principio: "todo tiene su origen en Dios" la prosperidad también, la felicidad, la vida, "..con toda bendición" antes de Cristo no teníamos Esperanza más que depender de nosotros mismos y esforzarnos por comer, vivir, protegernos, porque no teníamos a Dios, pero en Cristo fuimos bendecidos con toda bendición en los lugares celestiales! Ahora somos ricos porque la bendición de Dios que viene desde la eternidad abarca toda nuestra vida, lo llena todo, los depósitos del cielo están disponibles para los hijos de Dios, gracias a Jesús. Entiende que la realidad que ven tus ojos naturales, no es toda la realidad, hay una dimensión espiritual y Jesús es el camino, es la puerta para entrar, y ocupar el lugar que él nos designó en los lugares celestiales, junto a Él.
Que en este día comiences a usar tu nueva capacidad de vivir en el espíritu, y disfrutar las bendiciones de Dios para vos y tu familia.


P. Aldo Daniel Monegal

La nube de su Gloria

1 Reyes 8:10-12
10  Y cuando los sacerdotes salieron del santuario, la nube llenó la casa de Jehová.
 11  Y los sacerdotes no pudieron permanecer para ministrar por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Jehová.

La nube representa la gloria de Dios, su presencia, que guía y protege a su pueblo, en el desierto la nube de la presencia de Dios, se manifestó cuando Moisés terminó el tabernáculo, en el momento que el arca del pacto fue puesta en su lugar, la nube llenó aquella tienda.
En este relato de 1 de Reyes 8:10-12 se repite lo mismo, esta vez en la dedicación del templo de Salomón, cuando los sacerdotes metieron el arca en el lugar Santísimo, la nube de la gloria del Señor llenó la casa de tal forma que los sacerdotes tuvieron que salir, porque no podían ministrar por causa de la nube.
Cuando el orden y el diseño de Dios se lleva a cabo, Dios confirma manifestando su Gloria. La nube estuvo presente también en la vida de Jesús, cuando en el monte de la transfiguración, la nube cubrió a Jesús a Pedro a Juan y Jacob, junto a Moisés y Elías, y la voz del Padre confirmó que Jesús es su hijo y a él debemos oír, una señal de que Jesús está sobre todo, la ley, Moisés y los profetas.
Cuando la voluntad de Dios es nuestra prioridad, Dios confirma manifestando la nube de su presencia, a favor de nuestra vida. La guía, la protección, de su presencia, la llenura de su Santo espíritu debe ser nuestro anhelo.
Recuerda busca el diseño de Dios, para tu vida, cuando te mueves en él, la gloria de Dios, la nube del Señor se manifestará en tu vida.


P. Aldo Daniel Monegal

Dejando las cargas

Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.  (Salmo 55:22)

Las cargas no solo son los problemas comunes, laborales, familiares, que enfrentamos cada día, está palabra habla de esas cargas que no podemos dejar, que son como mochilas, en nuestra espalda que están adheridas a nosotros, y no podemos despegarnos de ellas. Estas cargas son la ansiedad, el temor, las heridas emocionales, que se transforman en pesadas cargas que arrastramos con dificultad. 
Las cargas que lleva mucha gente con mochilas llenas de cosas del pasado, abusos, violencia, situaciones graves en la niñez, pérdida de seres queridos, cosas que condicionan nuestra forma de pensar, condiciona la personalidad, y esclaviza. La ciencia no puede quitar estas cargas, solo puede acompañar dando estrategias para seguir soportando. 
Dios es el que quita la carga de tus hombros, Jesús dijo:"Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar" ( Mateo 11:28) no hay otra salida, el Señor es el único que puede y quiere liberarte.
El salmo dice: "Echa sobre Jehová tu carga y él te sustentará" a veces cargamos cosas que no nos pertenecen, vivimos cansados, nos ronda la tristeza, el desaliento está siempre presente, hay que entregar, soltar la carga, entonces Dios la llevará, y nos dará descanso.
"echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros" (1 Pedro 5:17)
Hoy es el día, para entregarle las cargas al Señor y descansar en él, "Más vale un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu" (Eclesiastés 4:6)

P. Aldo Daniel Monegal

Nuestra Refugio

Salmo 9:9-10
9 Jehová será refugio del pobre, Refugio para el tiempo de angustia.
10 En ti confiarán los que conocen tu nombre, Por cuanto tú, oh Jehová, no desamparaste a los que te buscaron.

Confiar en Dios es un tesoro que tiene la gente de fe, son personas que conocen sus límites, y saben que Dios puede llevarlos más allá. Los que entienden que sin Dios, todo es en vano, la Biblia los llama justos, por qué no solamente confían en Dios para que los levanté cuando están caídos, sino que se esfuerzan por vivir agradando al Señor con sus hechos.
Dios es refugio para los pobres, dice está palabra, pero no debemos pensar en la pobreza material solamente, la palabra se refiere a los pobres en espíritu, Jesús habló de ellos, en las bienaventuranzas, "Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos." Mateo 5:3
Los pobres en espíritu son los que dependen plenamente de Dios, saben que sin Jesús, nada pueden hacer, viven buscando su presencia, para ellos Dios es un refugio en el tiempo de la angustia.
Conocer el nombre de Dios es conocer a Dios, ¿cómo podemos confiar en un Dios que no conocemos? Por eso el texto dice:"En ti confiarán los que conocen tu nombre," Jesús vino para revelarnos al Padre, es necesario buscar al Señor para conocerlo, y así poder depositar nuestra confianza en Él. Dos bendiciones hay para nosotros en estos versículos, refugio y protección. En estos versículos encontramos tres acciones que debemos aplicar, ser pobres en espíritu, conocer a Dios, y buscarlo todo tiempo.


P. Aldo Daniel Monegal